Muchos días o casi todos los días, por
diferentes motivos, me consterno del débil, del sin techo, del último, de la
madre que no encuentra la forma de darle de comer a sus hijos y hasta me
emociono. Cuando llega este punto y como que no puedo escupir a la cara de estos
tiranos con cara de santo; no me queda otro remedio que recopilar datos para
escribir en su contra. Porque mi emoción es personal e intransferible y
silenciarme tiene un pecio, la muerta.
Cosa esta, probable pero demasiada cara para un ruin.
La revista Forbes,
especializada en la valoración de las grandes fortunas. Nos viene a indicar la
presidenta de Argentina, Cristina Fernández, viuda de Kirchner, es la jefa de
Estado más rica de Hispanoamérica, después del presidente de Chile, Sebastián
Piñera, e inmediatamente antes del máximo líder de la Revolución cubana,
Fidel Castro. Los chilenos sabían de la inmensa fortuna de Piñera y lo votaron
masivamente. No la ocultó porque la familia Piñera lleva varias generaciones
creando miles de puestos de trabajo y administrando a la perfección sus
empresas. Calcula «Forbes» que la fortuna de Sebastián Piñera ronda los dos mil
millones de euros. No necesita robar para gobernar con eficacia. La tercera
fortuna es la del comandante Castro, invertida en gran parte en el odioso
Imperio capitalista de los Estados Unidos. Fidel Castro tiene en su haber más
de setecientos millones de euros. Eso, la propiedad privada que cuestionan los
trogloditas del comunismo en España y con los que el compañero comandante no
parece estar muy de acuerdo.
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El luto de la victoria |
Ha robado y asegurado el futuro de los suyos en el
futuro exilio. Y entre uno y otro, aparece Cristina Fernández, la viuda de
Kirchner. No hay que pensar mal, pero resulta curioso que en una economía
temblorosa como la argentina, durante sus mandatos presidenciales el matrimonio
peronista haya acumulado tan singular abundancia de dólares. Una de las causas,
seguramente mal analizada por los enemigos de la encantadora mujer, es la
casual plusvalía de unos terrenos del Estado que adquirió el progresista
matrimonio en su primera etapa presidencial a poco más de un euro el metro
cuadrado y que hoy valen una inconmensurable fortuna. Sería lacerante e injusto
asegurar que la adquisición se hizo mediante las ventajas e informaciones que
el Poder procura. Entregó, al FMI, el cierre de balance de los
presupuestos de 2011con los gastos de hasta Mayo/2012. Así y todo daba negativo. ¿Sabéis
que argumentó cuando le detectaron? Que había sido un error contable. Este término
lo vamos a oír en España, a partir de ahora, un día si y el otro también. A la
raza política solo se le combate a escupitajos sonoros.
No creo que la inversión fuese fruto de la
casualidad si de la causalidad. Los terrenos
valían poco o nada, los Kirchner decidieron comprar para que el pueblo
argentino recibiera una parte de su inversión, y lo que de origen era una
acción de generosidad peronista se convirtió, al final, sin mediar
prevaricación ni avaricia, en un negocio redondo. Lo cierto es que el
peronismo, la luz de los descamisados argentinos, ha sido siempre muy rentable
para los dirigentes del movimiento obrero de aquel gran país, empezando por su
fundador, el general Perón, que no murió en la pobreza precisamente. Y resulta
incuestionable que la presidenta Fernández nada tiene que ver con el incremento
de su patrimonio personal. Ella se ocupa exclusivamente del buen gobierno de la
nación austral, y ha dejado en manos de su niño y del amigo de su niño, el
compañero descamisado Kiciloff, la administración de esos bienes. No se
descarta que del desorden provocado por la incautación de YPF-Repsol, que la mayoría de esos ingresos engrosen el
patrimonio de la exKK. Pero tampoco de ello sería responsable la ejemplar
señora, sino sus inteligentes administradores y testaferros, ¡manda huevos¡ la
capacidad de hipnosis de está burda pájara
Solo reconocidas son
25 sus propiedades en Argentina, sin contar el piso en La Recoleta, los dos
apartamentos y ocho garajes en el «Madero Center» de Puerto Madero, su casa de
Río Gallegos, y sus dos hoteles sureños. La verdad es que esta mujer compagina
a la perfección la política con la economía, si se trata de su economía, claro
está. La emoción me embarga.
Matizar en la del comandante, Fidel Castro, ni
merece la pena. Lo de México es para liarse a tiros con las dos bandas. Al
gorila Chávez le vamos a dedicar otro artículo especial. En España todos se
enriquecen menos el inepto, Rajoy, tampoco es pobre de ánimas benditas y, además,
la política le cuesta dinero, pero quiere poderrrrrrrrrrrr y este tiene un
precio.
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