La relación extramatrimonial entre PP y Ciudadanos, como todos esperábamos se ha roto. A Nivel Nacional y de la Región de Murcia.

  


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 La Justicia archiva otra denuncia del PSOE contra un cargo del PP en Murcia y van más de 80

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, da por concluido el pacto que tenía con el PP de la Región de Murcia y ofrece al Partido Popular la oportunidad de proponer un candidato alternativo antes de reunirse, que ya lo está y estaba haciendo, con otras fuerzas. Albert Rivera, en contra de la voluntad y buena fe del resto de miembros de Ciudadanos estuvo reunido –dos veces- con un interlocutor válido de Pablo Iglesias, al objeto de ofrecerle la gobernabilidad del Gobierno de Murcia. Sin más este le contestó, la última vez que se estaba estudiando dicha posibilidad. A gestora del PSOE, sin más, le dijo que borrase tal canallada política de su cabeza. Hay que recordar que, actualmente, al PP de la Región de Murcia le faltaron 673 votos de 750.000 para obtener mayoría absoluta.

Ayer, le llamó, Pablo Iglesias, para preguntarle por los argumentos de la posible moción de censura. El Presidente de la Comunidad murciana está imputado…..contesta Pablo Iglesias: --Nota que envíe a Pablo Iglesias y que entregaron en mano:

EL DIPUTADO POR C´s, DIEGO CLEMENTE, A LA ESPERA DEL AUTO DE UN JUEZ PARA ENVIAR SUPLICATORIO AL TRIBUNAL SUPREMO. DP 1416/16

RUEGO TOMEN ESTA INFORMACIÓN EN CONSIDERACIÓN, Y ANALICEN LA DOCUMENTACIÓN QUE LES ADJUNTO. DICEN SER UN PARTIDO DE REGENERACIÓN, Y EN CONTRA DE LOS AFORAMIENTOS. ESTE SEÑOR ESTA A LA ESPERA DEL AUTO DE UN JUEZ PARA ENVIAR AL TRIBUNAL SUPREMO.

Este está más que imputado ¿verdad? Y le indicó que en política no se puede ser tan sucio. Aún quedan 2 diputadas y un diputado.

C’s se agarra al acuerdo de investidura tanto nacional como territorial con el PP para exigir la dimisión o destitución del ex alcalde de Puerto Lumbreras, imputado en el caso Auditorio por la presunta comisión de cuatro delitos, que alega “persecución política”.


Eso es lo que se ha dicho en público. Entre bambalinas, la realidad es algo distinta. En primer lugar, la forja de una moción de censura en Murcia supondría poner de acuerdo a tres partidos hasta ahora incompatible en un mismo gobierno: PSOE, Podemos y Ciudadanos (juntos suman un escaño más que el PP en la Asamblea Regional). De ahí que las tres fuerzas se pronunciasen este jueves con extrema prudencia, empezando por el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, que recetó "ir paso a paso y no ponerse nerviosos".

Y es que el objetivo de Ciudadanos con este movimiento táctico es, en realidad, otro: redoblar la presión sobre el PP para que deje caer a Sánchez y proponga un nuevo candidato a la presidencia de la comunidad. "La cúpula del PP prefiere proteger a su imputado y romper el pacto de investidura antes que poner a un nuevo presidente del PP en Murcia", ha escrito Rivera en Twitter.

El pacto anticorrupción suscrito tras las elecciones autonómicas del 2015, que, junto a otras medidas, permitió la investidura de Sánchez, prevé "separar de inmediato de cualquier cargo, público o de partido, a imputados por corrupción política hasta la resolución completa del procedimiento judicial". El presidente murciano declarará el próximo lunes en calidad de investigado por los presuntos delitos de prevaricación continuada, fraude contra la Administración, falsedad en documento oficial y malversación de caudales públicos, por la construcción de auditorio durante su etapa como alcalde de Puerto Lumbreras.

Cierto es que, pese a lo que firmó en su día en Murcia, Ciudadanos ha impulsado en el Congreso de los Diputados una reforma legal que pone la línea roja en la apertura de juicio oral para exigir la dimisión de los cargos imputados. Y esa es precisamente la doctrina que siempre ha abanderado el PP para eximir de la asunción de responsabilidades a sus cargos investigados.

Poco tiene de casualidad que horas antes de dar por rota la alianza murciana, Rivera anunciase en Antena 3 reuniones la semana próxima entre su partido y el PSOE y Podemos para buscar una mayoría alternativa que permita poner en marcha las medidas de regeneración democrática a las que se comprometió el PP en el pacto de investidura. Concretamente, el partido naranja busca limitar los mandatos del presidente del Gobierno a ocho años, eliminar los aforamientos y crear una comisión de investigación sobre la presunta financiación irregular del PP. Tres compromisos a los que los populares.

Rivera ha advertido de que "si el PP no quiere cumplir", Ciudadanos buscará "otras vías parlamentarias para sacar las medidas adelante", convencido además que los votantes del partido mayoritario están de acuerdo en limitar mandatos y aforamientos pero el problema es que "Rajoy va en contra de los tiempos de regeneración que necesita el país". 

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