Política es algo demasiado serio como para dejarlo en manos de los políticos. Sigamos juntos.


Fernando Jaúregui, europarlamentario, para blog de Juan Pardo
Solo la democracia cuyas fuerza reside en   su sociedad civil es válida y legítima.  . En Gran Bretaña, mas de doscientos 'nobles' representantes de diversas actividades ciudadanas, desde cantantes como Mick Jagger, Sting o Brian Ferry, actores y actrices como Judy Dench, científicos como Stephen Hawking, rostros conocidos de la televisión, profesores universitarios distinguidos o hasta el entrenador del Manchester, sir Alec Ferguson, han firmado un manifiesto pidiendo el 'no' en el referéndum sobre la independencia de Escocia que se celebrará el próximo 18 de septiembre. Otros rostros conocidos, como el de sir Sean Connery (ennoblecido por la Reina), se han decantado, en cambio, por el 'si' independentista. Sin miedo a decir cada cual lo que piensa, los representantes de la sociedad civil se han colado de hoz y coz en un debate en el que al Reino Unido, y a Europa, les va mucho. Y aquí, en la España de los timoratos a pronunciarse, comenzando por esa Cataluña de los silencios profesionales y mediáticos, ¿dónde queda en la democracia española la sociedad civil?
Me hago esta pregunta azuzado por la brillante campaña 'Sigamos Juntos', que se lleva a cabo en ese Reino Unido que quiere seguir estándolo (todo indica que la derrota de los independentistas dentro de cuarenta días va a ser importante). Pero también inquieto ante muchos, demasiados, silencios en la sociedad española, que no solo en la catalana, donde me resulta evidente que muchos proclaman su adhesión 'patriótica' por conveniencia, pero muchos más callan por lo mismo... y por temor a las paredes del vecino. Hasta ahora, las reacciones en la intelectualidad, entre los cantantes –pero ¿dónde está el admirado Joan Manuel Serrat?-, en el empresariado, han sido demasiado melifluas, acobardadas. ¿Nada hay que contrarreste manifestaciones como las de la Diada, único soporte que le queda ya a Mas para mantener su política suicida? Para creer en una sociedad civil catalana tendríamos que asistir a otros debates mediáticos -a algún debate mediático, al menos--, al florecimiento de gentes, más allá de los políticos, que se decanten por el 'no', que sean capaces de decir el voz alta lo que muchos escuchamos a amigos catalanes, incluso ligados a Convergencia Democrática: que la sociedad entera, en la Cataluña corrompida que está enseñando sus vergüenzas al mundo  -qué lamentable espectáculo el de quienes agachan la cabeza ante el tremendo 'affaire Pujol'-, camina con paso firme hacia el abismo.
Cierto que en España se han producido manifiestos a favor y en contra del derecho de los catalanes a decidir; pero los abajo firmantes tenían más de políticos que de personas admiradas por su actividad intelectual o artística y el ámbito de resonancia de aquellos textos ha sido casi nulo. Cierto también que algunos animan movimientos como el 'libres e iguales' que congregan en alguna ciudad española a unos centenares de personas. No es eso; o no es solamente eso, porque aplaudo todas las formas de organización ciudadana pacífica que puedan darse. Simplemente me pregunto por qué callan, ante lo que está por venir, otros que algunas veces sí han hablado, fuesen los de 'la zeja' o los del ceño, y por qué no se manifiestan otros que nunca han hablado, como si lo que ocurre en este país nuestro no fuese, más allá de las bambalinas, de los focos o de la caja tonta, con ellos.
Ya sé, ya sé que la democracia británica, admirable por muchos motivos, es como el chiste del césped: lo tienen tan verde, tan bonito, porque lo abonan, lo riegan todos los días y*porque el césped tiene cuatrocientos años. Y porque si llaman a la puerta a las seis de la mañana es el lechero. Nuestro césped no tiene tantos años, ni tanto riego, ni tanto abono, más allá del de los campos de futbol, e incluso esos, a veces, tienen su historia negra, como el césped del Camp Nou, comprado, recuerda usted, a los cuidados del negocio de floristería de doña Marta Ferrusola, esposa del ex president Jordi Pujol. La democracia se riega con debates televisivos, como el reciente y me dicen que admirable entre el independentista escocés Alex Salmond y el ex ministro de Finanzas Alistair Darling, escogido por Cameron para representar al 'no' en la consulta; se abona con plena libertad mediática y se enriquece con la participación en la vida política de figuras como el cantante de los Rolling Stones o la escritora JK Rowling, 'madre' de Harry Potter, que donó un millón de libras a la campaña 'Mejor Juntos' de los unionistas.
Muchas veces me he proclamado partidario de una consulta libre, en la que puedan participar todos los implicados en una decisión tan grave como la separación de un territorio del resto del Estado. Que se celebre incluso aunque sea en base a la tremenda injusticia que supondría que solamente votasen quienes habitan en ese territorio, como si a mí, por ejemplo, no me fuese nada en la independencia o no de Cataluña: no me quiero sacar el pasaporte para visitar, por ocio o por negocio, esa ciudad maravillosa que es Barcelona.

Pero si pedimos a los líderes europeos que se pronuncien sobre la independencia catalana -y recuerden que fue Artur Mas el primero que, con su desdichada carta a los mandatarios de los países de la UE, llevó a su 'diplocat' al desastre--, ¿cómo no vamos a pedírselo a nuestros personajes más admirados popularmente, como deportistas o artistas de élite? ¿Cómo excluir la opinión de los ciudadanos corrientes y molientes del resto de España? La política es algo demasiado serio como para dejarlo en las exclusivas manos de los políticos. De modo que manos a la obra, no porque se nos vaya a quemar la comida…………….Puede que haya comida. 

Comentarios

  1. Esta comprobado que asi es..

    ResponderEliminar
  2. Tal vez por cuantía, la apropiación indebida, robo, expolio y muchos más delitos contemplados en el Código Penal, sea el perpetuado por Jorge Pujol, de ser cierta la estimación de Manos Limpias podría llegar a los 50 Mil MLL en pesetas casi 9 billones de pesetas. Ahí es na.
    ¿Será este "enano" el mayor escándalo de nuestra prostituida democracia? muy por encima de la protagonizada por el gobierno de mister X, alías D. Isidoro? ¿O lo será este de los EREs? ...a saber.
    Se ha filtrado los "argumentos" de la Jueza, les desinflo acudir prestos a declarar y ya pidieron amparo a la caverna de vendidos y presuntos prevaricadores del CGPJ ahí están los amigos...ya veremos, como se libran estos de los argumentos "acusaciones" de la Jueza. Que por cierto, ¿quién ampara a los parados andaluces?
    Y es que además del reparto entre colegas, queda aún el común denominador en toda España.
    El negocio de las concesiones: La cuestión es similar a todas las concesiones administrativas, unos lumbreras “localizan” un negocio, necesario o innecesario, negocian con la autoridad competente, promueven y convienen el tipo de concesión y contrato, realizan las modificaciones de leyes y ordenanzas necesarias, se prevé el 20% de comisiones, que se aumentará en el precio de licitación, sin contar la desfachatez lo que podrá ir aumentando mientras se ejecute la “obra”, obtenida la concesión y contrato, se va al banco, este tiene todas las garantías, la administración pagará si va mal, además de asegurarse un canon por si “sus” números no cuadran la administración paga, (las pagamos) así que esta sociedad que se beneficia de la concesión no tiene el más absoluto riesgo de inversión y menos de recursos propios. Privatizan los beneficios y socializan las perdidas ¿Cuánto hemos pagado de más entre comisiones y sobre precios?.

    ResponderEliminar
  3. Efectivamente Juan, me falto esa palabra, porque de Argentina donde soy yo, estamos desgraciadanente muy acostumbrados.
    Aunque ahora vivo en España y estoy empezando a aborrecer una historia similar.
    Menos mal que aqui la gente aun es honesta
    Saludos

    ResponderEliminar
  4. Magnífico, Juan, gracias.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario