El nacionalismo catalán es la base del terrorismo que viene.


Recuerdo cuando, Alfonso Guerra dijo, que los fascismos provienen de nacionalismos. Dicen bien, pero deben -aclaro que se refería a  los nacionalismos del Estado, no de los nacionalismos de las comunidades sin ESE propio estado. El nazismo nació del nacionalismo alemán, el fascismo del nacionalismo italiano y el falanquismo del nacionalismo español. El fascismo español nació, entre otras razones, para acabar con los nacionalismos catalanes, vascos y gallegos –este en auge-; y por eso, cuando triunfó e inspiró la ideología del franquismo, los hijos de mi generación estudiaron que "la patria no es tierra, ni raza, ni lenguaje. La patria es una unidad de destino en lo universal ».


Un catalán "supera" expresando su amor por Cataluña, es un criminal y el español que "supera" al expresar su amor por España, es un patriota. Por ejemplo, Piqué, que no es un partido independentista, ya que estaba a favor del referéndum el primer día, es un mal español y un criminal; Y aquellos que silban cada vez que juegan la pelota cuando juegan con el equipo español son tan patrióticos como el alcalde histórico de Móstoles. Y los autores y diseminadores de los miles de aspas, la mayoría de ellos de ingenio nulo y desagradable, que han circulado por la red en las últimas semanas para atacar a los nacionalistas catalanes y, sobre todo, a sus líderes. La verdad es que, como políticos, 

Puigdemont y Junqueras carecen de valor. Jordi Évole demostró al ser entrevistado Presidente y destacó recordarles que no hay mucho, había votado contra el derecho a la libre determinación y la curda subsahariana, y Josep Borrell en un debate televisado con Junqueras. Sin embargo, vale la pena Puigdemont Junqueras y para llevar adelante el proceso de la soberanía fraudulenta en nombre de la democracia se rieron y otra vez, y lo hicieron. Eso, en cierto modo, el método, no el independentista, es lo que lo descalifica.

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