Dos estrellas de la política, Ada Colau y Manuela Carmena, alcaldesas de Barcelona y
Madrid, respectivamente, han protagonizado un diálogo que ha servido como acto
inaugural de una reunión de tres días organizada por Barcelona en Comú, con el
lema 'Fearless cities' (ciudades sin miedo), a la que asisten representantes de
150 ciudades. Pero difícilmente se registrará más emotividad 'colauer’ en lo
que queda de ‘cumbre’ de la que ha suscitado la conversación entre las llamadas
alcaldesas del cambio, que, en la plaza del Ángel de Barcelona, ante más de un
millar de asistentes. El diálogo estaba centrado en lo que puede hacer el poder local para mejorar el
mundo y de sus experiencias en estos dos años en el cargo. Casi todas las
preguntas han sido rechazadas.
Ambas alcaldesas han coincidido en "Somos antisistema y
revolucionarias que creen en el amor".
Es más el amor es lo más importante de nuestras vidas, pero sin dinero
es imposible mantener vivo el amor.
Colau ha afirmado que el siglo XXI será de las mujeres y las
ciudades, y ha subrayado la necesidad de una alianza internacional de urbes
para combatir en varios frentes: a favor de la democracia y de la acogida a los
refugiados, y contra el presidente de los EEUU, Donald Trump, el fascismo y el
terrorismo. “Las ciudades podemos ayudar a que haya un cambio en el mundo”. A
la pregunta de si el mundo será de las mujeres ¿Qué pinta tanto amor platónico
antes narrado? El hombre será una mascota con cierto encanto testicular. ¿Un
follador nato? No, necesariamente, puede ser inspirador sexual de la mujer. Mientras
él hace la función sexual, la mujer puede preparar una conferencia.
Despechada y altozana salta, Manuela Carmena: ¿Sabía usted
que en Madrid ya hay más mujeres que prefieren mantener relaciones sexuales con
su perro antes que con su marido? No. No lo sabía en cuanto llegue a casa echo
al perro y, posiblemente, hasta la perra. Ya me extrañaba a mí eso “cariño saca
el perro a pasear para que está en forma”. Aunque creo que los cuernos de perro
son más llevaderos que los del vecino.
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