El que la justicia nacional
e internacional se haya liberado del secuestro al que estaba sometida por el
Gobierno, no les deja salida que el
golpe de Estado.
Todo tiene un principio y un
fin, que la Abogacía del Estado haya
negado la euroorden de detención de Puigdemont, dictada por el juez Llarena
sabiendo a ciencia cierta que estaba en vigor, les delata por un posible delito
de conspiración entre otros y si como es previsible les procesan, seguro que
van a contar todas las tropelías del movimiento bolivariano acaudillado por
Zapatero.
Si a esto, añadimos los 17.5
millones de dólares que recibió Baltasar Garzón para comprar a su novia, la
fiscal General, Lola Delgado o los no se sabe cuántos recibidos por Monedero,
Iglesias y Errejón a EEUU, no le quede otro remedio que actuar en consecuencia
en defensa de sus intereses para aclarar el ataque de las torres gemelas, donde
días antes habían volado activista de la Yihad, Caracas-New York.
De todos es sabido que EEUU,
sin previo juicio, tiene orden en vigor de que la naturaleza se adueñe de los
cuerpos de todo aquel que directa o indirectamente participase en el desastre
de las torres.
Hay historias personales que
explican muy bien cómo funcionan las puertas giratorias. Fijémonos por un
momento en la trayectoria personal de Antonio Miguel Carmona, con 58 años no ha
pasado de ser profesor del CEU, cuando Pedro Sánchez, sin ser una lumbrera, era
doctor en economía con 37 años o su mujer, Begoña Gómez que con 42 años ya era
catedrática de la complutense. Pero como que las puertas giratorias, no para de
dar vueltas, Adriana Lastra era licenciada en derecho con 19 años. Lo que es
cierto y verdad el fichaje de Carmona es el principio del fin para intervenir
la eléctrica. Endesa y Naturgy, prácticamente, ya están intervenidas,
fusionadas y su presidente será Iván Redondo….El recibo de la luz subiendo.
¿Cómo piensa atacar el
Gobierno al Estado de derecho?
Sencillamente, haciendo la
vista gorda a miles de manifestaciones –antes de navidad- con saqueos,
incendios incomprendidos –si por ellos- bombas incendiarias contra entes
públicos intimidación a los españoles de bien, mucha presión a las fuerzas de
seguridad, para que ls policía cometa algún
error que será el detonante del golpe de Estado, o sea, verdugos y
mártires.
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