La Exjuezapolítica, sin oposición, Manuela Carmena, estrena alcaldía, amparando y cobijando EL ANTISEMITISMO, LA VIOLENCIA Y LA MOFA DE LAS VÍCTIMAS DE SUS EDILES.


        Tras la resaca que nos ha dejado el pasado fin de semana la toma de posesión en los diferentes consistorios, plagadas de historias y chascarrillos que nos pueden resultar más o menos graciosas, más o menos emocionantes o intensas, como el caso de la alcaldesa de Jerez y sus dedos meñiques, como anécdota entrañable dado el estupendo toque de humor con el que la misma ha reaccionado haciendo gala de un excelente buen humor y mejor saber hacer, huyendo de lo que podía haberse entendido y, no sin falta de justificación, como un gesto razonablemente machista hacia su persona y es que a nadie se le escapa que detalles como el que la han hecho protagonista, por triste que parezca, no se analizan y critican en un hombre.
        Pero dejando al margen esta cuestión meramente anecdótica una inquietante noticia vuelve impactar y chocar de manera absolutamente frontal con mi tranquilo y placentero desayuno:

        “CARMENA ACEPTA LA RENUNCIA DE ZAPATA COMO CONCEJAL DE CULTURA POR LOS TUITS DE 2011”


        Y es que tras la renuncia del concejal, Carmena la admite al frente de Cultura, sin embargo, continua manteniéndolo como concejal raso.

        Y yo me pregunto:
        ¿Cuál es el verdadero motivo por el que la nueva Alcaldesa de la capital acepta su renuncia?
        Será tal vez porque entiende que las manifestaciones a través de los tuits publicados atentan contra la dignidad de las personas en  clara y objetiva actitud antisemita, como en un principio hemos pensado todos, o será tal vez que entiende que tal actitud, únicamente puede ser reprochable desde el área de cultura, no tanto desde otros ámbitos que deben resultar tener menos categoría para la Sra. Carmena.
         ¿Qué está ocurriendo? ¿Cómo debemos interpretar el hecho de que el mismo tipo, con el mismo pensamiento y sentimiento pueda continuar siendo regidor sin problema alguno? O es que encima va a resultar que para colmo debamos alabar “la proeza” ejecutada por parte de la nueva formación por el hecho de haberle apartado del área de cultura y los madrileños tengan que seguir soportándole como su representante.
        Pues no, definitivamente, no. El deleznable antisemitismo puesto de manifiesto por este señor a través de las palabras publicadas en la red y recuperadas estos días por los medios de comunicación, resulta criticable desde el área de cultura, desde cualquier ayuntamiento de este país, desde cualquier plataforma pública y privada y, hasta del entorno más íntimo y arcano de una persona que, se sienta, se crea y respire como tal.
        Y es que no nos encontramos ante un acto reprochable desde el punto de vista ético y personal únicamente, que también, sino que nos encontramos ante lo que, sin duda, puede constituir un ilícito penal sancionado y tipificado en nuestra legislación, ésta que tan bien, doy por sentado, debe conocer su cabeza de lista, como profesional del derecho que impartía justicia.
         Con idéntico mal gusto se pronunció este mismo individuo utilizando las secuelas del terrorismo como motivo de mofa, en el caso de Irene Villa, o las referidas a la tristemente desaparecida Marta del Castillo, palabras éstas que debieron despertar en las familiares de las chicas una repugnancia significativa aunque proporcional a la  que debe despertar en cualquier persona de bien que se precie y que entiende y empatiza con el sufrimiento de esta gente, y todo ello, amén de lo publicado por otro de los ediles de Carmena, Pablo Soto, fomentando y enalteciendo la violencia, aunque en este caso se han ahorrado y, por qué no decirlo, nos han ahorrado el bochornoso ridículo de apartarlo de ningún área en concreto, SOTO se queda en su puesto “por méritos propios”…

        ¿Alguien se ha preguntado qué hubiera pasado si tales hechos hubieran sido destapados y achacados a Esperanza Aguirre, o, sin ir más lejos, a cualquier otro representante del Partido Popular? La respuesta la dejo al albur de cada uno aunque vaticino que ésta será, como no puede ser de otro modo, congruente con el color político que cada uno desprende, aunque en todas ellas existirá un denominador común y es que de sobras es conocido que no se tiene la misma vara de medir con unas personas que con otras.
        Así que concluyo con gran, aunque esperado, pesar expresando el hecho de  que comenzamos la legislatura “del cambio” con un ridículo, lamentable e intolerable intento de "Lavado de cara” protagonizado por el partido que se congratula de abanderar la defensa de los intereses de las perdonas por encima de cualquier otra cuestión, sin embargo,  comienzan su andadura amparando y cobijando a este tal "Zapata" que si tan gravemente atenta contra las mismas de manera pública, no quiero pensar qué puede llegar a expresar de manera privada, por lo que mucho me temo que nos espera en la capital un futuro incierto, aunque, eso sí, mucho me temo, estará  plagado de suculentos titulares para los periodistas... La comida está servida,


        Buen provecho…

Comentarios